El Jara afrontaba su tercer partido de liga después de dos victorias que insuflaron ánimos y llenaron de entusiasmo a un equipo que se estrenaba en competición. El rival, Arturo Soria, no tenía nada que ver con los dos anteriores: más trabajado y con más entrenamientos a sus espaldas. Ante tal poderío, el Jara apenas aguantó un cuarto. Después, el bajón físico y la falta de ritmo evidenciaron que todavía queda mucho por trabajar en este conjunto para codearse con la élite. El resultado, 40-18, da fe de ello.
Pese a todo, se pueden sacar bastantes cosas positivas. La primera, la incorporación de Juan Miguel W., que dará que hablar en un futuro También se vio la progresión de varios jugadores como Fernando D. o Rodri M., que poco a poco se van soltando en el campo. Si a ello le unimos el talento que Jesús S. no pudo demostrar por la acumulación de faltas, la intensidad de Jaime M. que se vio mermada por molestias en la espalda o la eficacia de un Joaquín al que se le vio cansado, el equipo está más que preparado para dar guerra en esta liga. Solo falta trabajar ciertos aspectos como el bloqueo del rebote, la tranquilidad o el físico. Aún estamos a comienzos de temporada, así que queda mucho camino para demostrar la calidad.
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Nos vemos allí los 300. Tus 300. Esa es la audacia que nos está pidiendo el Papa… ¡Hacer lío!
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