Realmente es el único calificativo que se nos ocurre para definir esta jornada. Tremendo ambientazo en el patio del Jara. Tremenda la tensión en todos los equipos. Tremendo el esfuerzo de cada uno de los jugadores. Tremendo, como siempre, el Mundialito.

Todo se presumía fácil para los hombres de Senegal en su enfrentamiento contra Brasil. Sin embargo, la gente de Cuchet vendió cara su derrota. Un arbitraje más que dudoso pitó varios penaltys severísimos a favor de Senegal (especialmente el de Miguel González, dará qué hablar). De todas formas, fue un gran partido con impresionantes jugadas. Hay que seguir a hombres como Jesús Mª Sánchez y “Turbo” Nico Corominas. Mucha calidad.

Otro partidazo fue el Irlanda-Italia. La falta de hombres clave en la escuadra irlandesa fue suplida con la garra de Jaime Cánovas y Javi Ramos. Sin embargo, el orden italiano les llevó a la victoria. Gran fichaje el de Javi Moreno. Mientras, Gabi Arbáizar se colaba una y otra vez por las piernas de Galis para marcar.

De postre, emoción a raudales. España se lo jugaba todo. Canadá se lo jugaba todo. Sólo uno podía pasar. La balanza se decantó del lado canadiense pero todos merecieron la victoria. Gran partido de Gabriel Rodrigo y Miguel Ángel Galindo, pero no fue suficiente. Los muchachos de Juan Giner están muy firmes y aspiran a todo.

Este viernes, desenlace final.

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