Allí donde va el Jara triunfa. Este es el resumen de la convivencia de 5° y 6° del puente del Pilar.
la familia Valdecantos que nos acogió fantásticamente. Ahí estuvimos un largo rato saltando en la cama elástica y jugando con los hermanos pequeños. Aunque el gran protagonista fue Roque, una especie de Hulk en versión canina.
A eso las 5 de la tarde salimos hacia el Escorial con intención de ver el Monasterio. Dimos un paseo por el mercado medieval y nos pusimos en camino hacia la finca.
La gran atracción fueron sin duda las ocas y las gallinas. Mateo y Alfonso no perdieron tiempo en presentaciones y fueron a tratar de acariciar a la oca dominante, tarea nada fácil.
Eso sí, con cuidado, ya que parte de nuestro desayuno dependía de que no se pusieran muy nerviosas.
Cuando empezó a anochecer, después de haber escalado las grandes encinas del lugar, fuimos a preparar la cena made in Nacho T. Gonzalo D M. Después de deleitarnos y llenarnos de sabrosas pizzas, hicimos una intrépida exploración nocturna en la que Bosco P capturó varios sapos en la oscuridad. Después vimos una película proyectada en la pared y comimos nubes de golosina delante de la chimenea.
Al día siguiente amanecimos con el olor de los huevos fritos con bacon (si respetas a los animales ellos te lo agradecen con detalles así), cortesía de Alfonso. Después de asistir a misa nos dirigimos al pantano y estuvimos un buen rato jugando y sacándonos fotos. El viaje de vuelta lo hicimos al ritmo de las canciones del Jara, donde de descubrimos el talento musical de Pablo F.A . Ir al Escorial mola, pero ir al Escorial con el Jara mola más, como diría Borja P.
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