EL JARA SE PONE TORERO

Este año la fiesta de fin de curso ha sido especial. La iniciativa de los padres del Jara ha sabido poner la mejor guinda. Así que, en vez de un festival más, el patronato del club había promovido una capea familiar para conseguir fondos de becas para las actividades de verano. Y la verdad es que la idea ha sido un acierto.

El domingo 23 de junio amaneció con tintes de ser el día ideal para una capea. Llegamos a Cerceda. Olor a campo y a principio del verano. Y a toros. Llegaban poco a poco un buen puñado de familias: niños, neveras, viandas…

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Arrancó un día diez en familia con la Misa celebrada por Don Leo, que aprovechó para decir good bye a muchas familias. O see you later.

Las primeras vaquillas aparecieron en escena antes de la comida. Sobre el ruedo, capotes y toreros novatos, pero valientes. Lógicamente, hay menciones especiales. En primer lugar, para la grada entusiasta llena de colores. Después, el juicio de cada asistente tendrá sus premios, pero para el redactor de esta noticia, los galardones de la jornada están clarísimos.

Premio A Portagayola: A los padres que han promovido esta capea solidaria que tiene pinta de convertirse en tradición del Jara. Una más.
Premio A Mi No Me Torea Nadie: Papá Pepo Arvilla, tan de campo como las amapolas. Un diestro en esencia. Un maestro con coraje. Pepo, el de siempre.
Premio Alternativa: A Andrés Pampillón, que sudó el polo con banderita como los toreros más entrenados. Capote, ambiente y saltos. Puso el ritmillo de la capea.
Premio El Mundo por Montera: A Pablo García, que toreó con sombrero en vez de con capote. Como hacen en Roma…
Premio Matador: A Enrique Gil-Casares, que no desaprovechó ningún segundo del día. Pilló el capote al aterrizar, fue el más valiente del día, y se acostó con el traje de luces…
Premio Pura Sangre: A un padre con arte: Eduardo Hernández-Armijo.
Premio San Fermín: El padre que estuvo más cerca del toro: Pablo Poole… En el fondo, todos le esperábamos así de atrevido, como siempre…
Premio Banderilla: A Jorge Otero, que le supo poner las banderillas a la vaquilla con su mismo lomo.
Premio Matías Prats, padre: a Luis Paredes, el locutor de la jornada.
Premio Picador: A Nacho Marín y sus apariciones fugaces sobre la plaza.
Premio Recortes: A Borja Fernández, un valiente saltarín de vaquillas con proyección internacional.
Premio Salvavidas: a Javichu Sotomayor, que se dejó la piel, literalmente…
Premio Promesa del Toreo: A Miguel Poole, que si fuera por él, habría salido a torear también a la de los cuernos…
Premio Niño de Trebujena: A Ángel García Donate, que parece que ha estado con toros toda su vida.
Premio El Aguador de Sevilla: A Carlos Torquemada, especialista en riegos de albero.
Premio Ensaladilla del Día: A Paula Pou y sus artes culinarias.
Premio Impulso: A Yago Herrero votando para subirse a la verja…
Premio Paquirrín: A Ignacio Ávila y sus pases de diseño.
Premio Valor y al Toro: A Saso Hernández-Armijo, uno de los pocos que supo mirar de frente a todos los bichos de la finca.
Premio Granja Escuela: A todos los niños que se hicieron fan de Neymar… el cerdito…
Premio Dúo Torero: Ignacio Blázquez y Santi Valenzuela.
Premio A Punto de Quedarse en el Ruedo: A Jacobo Hernández-Armijo… Uff, qué sudores…
Premio Burladero: A Gonzalo Calvar: el otro hombre de acero que sabe frenar a las vaquillas con la pierna…
Premio Paso Doble Español: A Lucas Arbáizar, Álvaro Arvilla, Javichu Sotomayor, Borja Fernández y Álvaro Hernández-Armijo y sus bailes a pie de pista… ¡Geniales!
Premio Toreras: A Cristina y a Mercedes, dos madres con arrojo.
Premio Los Toros desde la Barrera: A Ramón González…
Premio Puerta Grande: A Beatriz Ortiz, Cristina Cerezo y María José Díez. Y a todas las madres que han estado detrás de esta primera capea.