El desafío estaba servido. La lucha se presentaba encarnizada. Dos niveles frente a frente. Por un lado la banda de Andrés, los hombres de Quinto. En frente, las hordas de Cristóbal, los inconfundibles personajes de Sexto. El lugar para el duelo no podía ser otro: el Laser City. Una tarde de sábado bastante mítica.

Aunque la victoria fue para los hombres de Cristóbal (todo hay que decirlo, con alguna ayuda de gente de Quinto), la cosa estuvo muy reñida. Clave fue el papel del gran Ignacio Hernández, todo un record. Dani Rivera quiso hacer otras plusmarcas pero aún no sabemos si tenía claro de qué equipo era.

De record fue el careto de Nico Pérez al verse con un arma láser. Acababa con todo lo que se movía. Álex Rabadán y Javi Varela fueron auténticos comandos de operaciones especiales. Tampoco les fue mal a Nico Matji, Ignacio Bernedo e Ignacio Ávila. Por la tarde el desafío continuó con un campeonato en el patio y en el famoso “frontón Galindo”. Como para olvidarlo