Este sábado el servicio meteorológico de Cuarto volvió a clavarlo y montamos un planazo a cubierto: carrera de chapas.

Tras construir un circuito que ya quisiera Alonso, pusimos las chapas a funcionar. Al principio la cosa estuvo bastante disputada pero, poco a poco, Rodrigo y Santi se fueron distanciando. Por detrás Fernando Durbán se desesperaba con su chapa.

La famosa “cuesta grasienta” marcó claramente las distancias. Gonzalo Rabadán se escurría constantemente… y Gabi Martínez ni siquiera llegaba. La segunda etapa siguió muy igualada. Miguel González hacía diabluras con su chapa pero, una y otra vez, acababa fuera del circuito. Para paciencia la de Pablo del Campo que no encontraba el juego de pulgares.

Las dos últimas etapas, con las famosas “arenas movedizas” y la “recta Nadal” haciendo estragos, fueron la clave. Santi se alzó con la victoria, algo para la Historia.