Una vez más los niveles de 5º y 6º demostraron que no hace falta ser de los mayores para demostrar la garra que uno lleva dentro. Y es que disfrutamos de una tarde de cuevas, en las míticas cuevas del Reguerillo.

Al principio todo estaba oscuro, pero poco a poco nos fuimos haciendo a la poca luz que había. Hubo todo tipo de sensaciones y pasamos por todo tipo de zonas, unas más grandes y otras más pequeñas. Como buenos espeleólogos nos arrastramos para pasar por cavidades muy estrechas. Tanto es así que alguno afirmó: “Yo no paso.” Pero no hubo problema, pasamos todos.

Entre algún que otro susto, conseguimos salir de la cueva. Algunas declaraciones de los asistentes fueron: “Este es el mejor plan del curso” (Pablo Torquemada), “¿Cuando vamos a repetirlo?” (Santi Bernedo) o “¿Podemos volver la semana que viene?” (Juan Herráiz). Y es que todos están esperando la próxima excursión a las cuevas del Reguerillo.